El miércoles 4 de noviembre 2020, el huracán de categoría 4 “Eta” llegó a Honduras continental. Cientos de miles de personas se quedaron sin hogar de la noche a la mañana, ya que la mayor parte del norte del «Valle de Sula» está inundado. Más de 2 millones de personas viven alrededor de la ciudad de San Pedro Sula. Aldeas enteras se han inundado, miles de casas han sido destruidas y la gente está huyendo de las inundaciones o espera en los techos de sus casas hasta que llegue la ayuda.
Ahora el hambre y la desesperanza se están extendiendo por todo el norte del país. Todo esto en un momento en el que el país ya está sufriendo severamente las consecuencias del virus Covid-19.
Nuestra escuela Sta. Mónica, Vida Nueva, no sufrio muchos danos. Y està sirviendo como albergue por ahora.
El centro de salud de Cofradia dirigido por las Hermanas, ha recibido un gran número de personas sin hogar. Las Hermanas religiosas, cocinan más de 1000 comidas al día para saciar el hambre hasta que el agua se haya drenado y los damnificados pueda regresar a sus hogares o lo que quede de ella.
El jardín de infancia de Olanchito fue inundado por el río cercano. Tan pronto como se nos informe de los daños, enviaremos la ayuda necesaria para la reconstrucción.
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